La Historia compendiada de las Cuatro Órdenes Militares de Santiago, Calatrava, Alcántara y Montesa (publicada originalmente en 1862) constituye una buena muestra del debate ideológico y sentimental desatado en la España de mediados del siglo XIX. Su discurso postula un regreso al pasado, a aquella época medieval tan anhelada y mitificada que revivían los románticos y que había quedado oscurecida durante varios siglos de humanismo y racionalismo. Las corrientes ilustradas, sin duda, trajeron un gran progreso en las ideas, las ciencias y la economía, pero vaciaron de creencias y de espíritu a las sociedades occidentales, en las que la diosa razón no era capaz de superar la fuerza de la religión. La evocación idealizada de un mundo movido por los principios nobiliarios y caballerescos, el valor de la defensa de la fe y de las causas justas, la vida ascética al servicio de Dios, nunca han dejado de mover pasiones.