La explotación del sujeto libre es el problema social concreto que late en todos los textos producidos por la Modernidad. Eso es la ideología: no solo ser progresista o conservador, sino tomar la noción de sujeto libre como presupuesto discursivo en todo caso, tanto en las formas de expresión subjetivas como en las objetivas. La modernidad discursiva es, pues, la consagración de las distintas formas de decir yo soy sujeto libre .