Lo que comenzó como una simple afición y entretenimiento de niños, en el futuro nadie imaginaba que se convertiría en algo mucho, mucho más grande. A pesar de no conocerse entre todos, el grupo mantenía un mismo sueño en común: coronar una de las mayores cumbres de la península Ibérica.Una historia repleta de superación, amor y, sobre todo, mucha amistad.Nos encontramos ante una verdadera lucha titánica, o mejor dicho, de gigantes.