Gales huye con su hija al único lugar en que no podrán encontrarla. Solo quiere ganar tiempo para ella, que siga adelante entre las ruinas de un mundo roto y la semilla de algo que está por venir, algo indefinible y terrorífico. Ese viaje, que en realidad es un retorno, la llevará a enfrentarse con su madre después de décadas sin hablarse, a viejas amistades perdidas, y a un pueblo que la odia y teme a partes iguales. Perseguida por asesinas profesionales, sectarios, matones armados y una agencia secreta encargada de la protección del planeta frente a poderosos entes alienígenas, solo aspira a que todo acabe. Porque todo final es un principio y en su vida no cabe más que redención, muerte, y el ardiente sol de la infancia que abrasa el camino.