En esta obra, el autor sostiene que la era de la globalización y de las nuevas tecnologías ha de ser profundamente espiritual y solidaria, también desde el punto de vista jurídico, o será opresivamante beligerante y destructiva. En la primera parte, el autor se acerca al derecho desde esta perspectiva multidimensional y explica la profunda relacion existente entre el derecho y la espiritualidad, así como los procesos de espiritualización del derecho. El autor defiende la suprarracionalidad como justificación última para proteger la religión, el valor intrínseco de lo religioso y la posibilidad de que los ordenamientos jurídicos seculares reconoczcan a Dios sin merma de su secularidad. En la segunda parte, el autor esboza las semblanzas de algunos juristas egregios que han influido tanto teórica como prácticamente en la evolución del derecho occidental, siguiendo las pautas multidimensionales establecidas en la primera parte.