El estuche incluye los títulos: Tampoco pido tanto y ¿A qué estás esperando Tampoco pido tanto Una novela erótica de alto voltaje que hará realidad tus más secretas fantasías. Carol trabaja como bailarina en distintos espectáculos, aunque su sueño es volver a ejercer de tripulante de cabina, y la oportunidad se le presenta en la compañía High Drogo. Daryl es comandante y viaja por todo el mundo pilotando aviones de dicha compañía. Ambos se conocen a través de Lola, hermana de Daryl y amiga de Carol. Y, aunque se atraen, y los dos están abiertos a disfrutar del sexo sin tapujos, intentan no acercarse más de lo debido, pues no quieren causarle problemas a Lola. Sin embargo, todo cambia cuando el corazón puede a la razón. Incapaces de resistirse a la atracción que sienten el uno por el otro, deciden al fin disfrutar de las oportunidades, de la vida y del placer. Sexo telefónico, tántrico, tradicional, tríos, dogging y todo cuanto puedas imaginar. Con Tampoco pido tanto, Megan Maxwell nos adentra en un sinfín de posibilidades para disfrutar de las relaciones íntimas. ¿Te la vas a perder ¿A qué estás esperando Una novela romántico-erótica tan ardiente que se derretirá en tus manos. Can Drogo, piloto e hijo del dueño de la empresa aeronáutica High Drogo, es un hombre alto, guapo, adinerado, simpático Puede elegir a la mujer que desee, y aunque disfruta de esa «magia especial» con la que le ha dotado la vida, en su interior siente que todas lo aburren. Por su parte, Sonia Beched es la mayor de cuatro hermanas y la propietaria de una empresa de eventos y de una agencia de modelos. Can ve en ella a una chica divertida, atrevida, sin tabúes, con la que se puede hablar de todo, incluido de sexo, pero poco más, pues considera que no es su tipo. Hasta que un día las sonrisas y las miradas de la joven no van dirigidas a él, y eso, sin saber por qué, comienza a molestarlo. Sexo. Familia. Diversión. Locura. Todo esto es lo que vas a encontrar en ¿A qué estás esperando , una novela que te hará ver que, en ocasiones, tu corazón se desboca por quien menos esperas sin que puedas frenarlo.