Tras sufrir un terrible accidente de coche, en la difusa línea que separala vida de la muerte, a Malena se le aparecen todas las palabras que sequedaron sin decir: palabras de amor, de perdón, de amistad, de reconocimiento?Por su mente desfilaron todos sus amores, los felices y losfallidos: aquel que la hizo sufrir, aquellos otros que le sirvieron para olvidary su amor actual, a quien tanto debe y de lo cual hasta ahora nose había dado cuenta;su mejor amiga, a la que olvidó decir «te quiero»antes de que se fuera;su familia y, sobrevolándolo todo, el personaje desu perrita Mia, una figura entrañable, divertida y sorprendente que conseguiráencauzar el destino de Malena para que nunca más olvide decir«Te quiero». «Yo me quedé tanto tiempo empapada, sin paraguas, sin consueloque cuando dejó de diluviarme quedé inmóvil. Y continué enaquel mismo lugar imaginando que seguía cayendo, que me seguíacalando hasta los huesos, cuando ya lo único que quedabaera un pequeño charco en el que continuar chapoteando. Peroera tu charco, Mario, y el mío. El nuestro, pensaba yo.»