El gran reto de nuestra era continúa siendo el grabado a la entrada del templo de Apolo de Delfos, entender como percibimos, nos movemos, recordamos, etc... es decir, conocernos a nosotros mismos. Para ello, sin duda, una de las grandes cuestiones es discernir todos los pasos acerca de cómo funciona nuestro sistema nervioso. No siempre hemos pensado que el sistema nervioso era un órgano esencial para, por ejemplo explicar nuestro comportamiento, el ser humano ha creído que su comportamiento está controlado por un alma, un espíritu o un sistema racional manteniendo diversas opiniones acerca de su localización, así ni en el Antiguo ni en el Nuevo Testamento no se cita ni una vez la palabra cerebro, sin embargo si citan cientos de veces el corazón y hacen referencia al hígado, intestino... como lugares de asiento de la pasión, el coraje y la compasión. ´te doy un corazón de sabiduría´ dijo el profeta. Vemos como el estudio de la mente, desde cualquier punto de vista, continua y continuará siendo un tema apasionante, sobre todo para los que quieran aceptar el reto con el que comenzábamos: ´Conócete a ti mismo´.